Según un comunicado del Ayuntamiento de Leganés, agentes de la Policía Local fuera de servicio interrumpieron una reunión municipal, entrando por la fuerza, para exigir una subida salarial. Los agentes podrían haber propinado golpes en las cristaleras de la sala donde se celebraba la reunión, provocando “momentos de mucha tensión”.
Por su parte, los sindicatos de la Policía de Leganés CPPM y UPM han emitido otro comunicando asegurando que “no reclaman ningún aumento salarial, sino que se oponen rotundamente a la bajada de sueldos aprobada unilateralmente por el Equipo de Gobierno”. En el comunicado también niegan los actos de violencia o amenazas que desde el consistorio aseguran que se produjeron.
Según la versión municipal, los hechos ocurrieron en el edificio de la Casa del Reloj, durante el trascurso de la reunión de la comitiva municipal con los sindicatos de la Policía Local, en la que se debatía el incremento salarial que reclama la plantilla. En esos instantes, medio centenar de agentes habrían entrado por la fuerza al edificio, “ocasionando destrozos y profiriendo presuntas amenazas e insultos”.
Los sindicatos aseguran que no pueden tolerar más los continuos ataques del Gobierno Municipal y recuerdan que “han reducido la plantilla en 90 efectivos, acumulan deudas salariales e incumple sistemáticamente el Acuerdo Regulador”. CPPM y UPM no descartan emprender acciones legales contra los responsables municipales.